lunes, 24 de enero de 2011

- Lunes por la mañana -

Los lunes por la mañana son un buen día para escribir. Sobre cosas, pensamientos, personas atontadas y besos matinales. Pero como hoy ya he hablado de ello, poco escribiré.

Cansancio, sueños recientes (que ya no recuerdas), agua caliente, y una falta de ruidos que duerme a cualquiera. Sábanas, mensajes, bostezos, y una semana muy larga por delante.


*Taranaranaaa, Taranaranaaa*… Posponer. Mmmmmm… Agua. ¿Bebes? Buenos días princesa. ¿A qué hora llegas? Frío. Te echo de menos. Próxima. Espérame dentro. Tonto. ¿Cómo estás? Ahora mejor. Bésame. Café. Te amo. Café.


Me enamoro cada vez que le veo. Y, aunque no haya salido el sol, el día parece contento.

Definitivamente, hay que levantarse antes.

5 comentarios:

  1. ¿Levantarse antes? ¡Qué dices! Yo me levanto tarde y aún así me cuesta. Suerte del café que tan bien describe La Voz. Quince minutos para hacer todo y salir de casa. Metro: lectura de 'Rebelión en la granja' y cabezaditas inevitables. Rubén Darío: 10:45 am. Ahora sí empieza el día.

    ResponderEliminar
  2. Yo también soy de levantarme tarde, muy (!) tarde. Pero veces -por el día, por la persona, o ambos- merece la pena hacer un esfuerzo y separarse de esas sábanas que te abrazan como si no hubiera mañana. Y hoy era uno de estos días. De momento, he tenido una mañana muy productiva. ¡Te deseo un día igual!

    ResponderEliminar
  3. Y es que las seis de la madrugada siempre puede ser una buena hora, tanto para irse a dormir después de una gran noche como para levantarse para pasar una mejor mañana.

    Sabes? no hay que dejar que la gente nos diga para que sirven las horas, lo bueno y mejor de cada uno de los días es poder hacer cosas distintas y darles distintos significados a cada una de nuestras distintas horas en nuestros distintos días de nuestras tan distintas vidas y, sobretodo, disfrutar siempre y SONREIR, como no.

    Un beso =)

    ResponderEliminar
  4. Contigo siempre es el contexto adecuado

    ResponderEliminar
  5. "*Taranaranaaa, Taranaranaaa*… Posponer." Ese es el mejor momento de la mañana. Qué gozada acurrucarse de nuevo entre las sábanas. Curiosamente es el momento en el que encuentras la postura ideal. Cierras los ojos, otra vez. El leve cosquilleo del cuerpo te envuelve de nuevo. Te estás durmiendo; y de repente, *Taranaranaaa, Taranaranaaa*… Posponer otra vez. Vuelves a lo mismo. Miras el reloj. *Me quedan 3 maravillosos minutos...*
    Así son mis lunes por la mañana.

    ResponderEliminar